Después del sismo de 7 de septiembre de 2017. El gobierno del Estado de Oaxaca implementó programas de apoyo
Intervención de la titular de la SEDATU durante la conferencia de prensa
Fuente: Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano
A dos meses del primero de los sismos que afectó diversas entidades del país, la Titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU) informó que se habían entregado 62 mil tarjetas para la reconstrucción del estado de Oaxaca.
La Titular de la SEDATU hizo un balance de los daños y del avance en la reconstrucción de los más de 25,000 hogares con pérdida total registrados en la entidad.
Destacó que un total de 5,000 viviendas debieron ser reclasificadas a daño total, luego del sismo del 23 de septiembre que terminó por incrementar lo que en un principio era una afectación parcial, de tal forma que las familias recibirán 120 mil pesos para la reconstrucción de su nuevo hogar. La intención era que para diciembre del mismo año, se lograran poner en pie al menos 3,000 casas para que sus pobladores pasaran las fiestas decembrinas en un nuevo hogar, afirmó en conferencia de prensa
El gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa, destacó que el proceso de demolición y remoción de escombros llevaba un avance de 65% y que la etapa humanitaria estaba llegando a su fin con la reactivación económica y la reconstrucción de toda la entidad.
La Secretaria Rosario Robles destacó que en el estado, de manera total, 63,386 viviendas fueron dañadas por los sismos de septiembre. De éstas, 37,751 tuvieron daño parcial y 25,626 afectaciones totales, por lo que deberán ser reconstruidas por completo. Son “684,000 metros cúbicos que se demolieron y retiraron de la vía pública y se llevaron a los centros de tiro designados por la SEMARNAT; este costo superó los 200 millones de pesos.
Sin embargo, después de tres años del sismo, existen familias que aún no se han recuperado y no tienen un lugar digno para habitar.
Elizabeth Sánchez, hasta el año 2020 seguía siendo una de las víctimas del sismo del 7S de 2017, su casa colapsó y desde esa fecha tuvo que vivir debajo de una lona a un lado de lo que fue su vivienda junto con su esposo e hijo y pese a la crisis sanitaria actual.
Como damnificada, Elizabeth recibió una ayuda gubernamental de 120,000 pesos para la reconstrucción de su casa, pero el encarecimiento de los materiales y los abusos de los albañiles que la estafaron, cobrando hasta 1,000 pesos por día, acabaron con esos recursos.
Al año 2020, se colocó una lona colgada en el palacio municipal de Juchitán de Zaragoza donde se informaba de los avances en la reconstrucción de las viviendas de los damnificados, y señalaba que 3,813 casas habían sido reedificadas con una inversión de 559.9 millones de pesos, una de las regiones más pobres de México y las más afectada por ese terremoto que ocasionó 98 fallecidos. Pero en esa cifra no se consideraron decenas de viviendas y de familias damnificadas que todavía no han visto llegar los apoyos de los Gobiernos federal y estatal para que, durante la pandemia del coronavirus, se quedaran en casa y no salieran a trabajar exponiéndose a un contagio.
Magaly Sánchez Santiago, activista, cuestionó qué capacidad existe para construir una vivienda con unos 120,000 pesos o de repararla con 15,000 pesos. "¿Qué puedes reparar con esa cifra si estás en una etapa de emergencia, de contingencia sanitaria y tienes que vivir al día y no tienes trabajo. Juchitán colapsó totalmente y los recursos eran insuficientes", apuntó.
A nivel estatal, el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, informó que se habían reconstruido 60,000 viviendas dañadas por el sismo, además de 60 centros de salud, y en el año 2021 se pretendían reconstruir unas 2,000 escuelas. Con estas heridas sin atender, Juchitán no se recupera del terremoto del 7 de septiembre, aún en sus calles hay muros rotos y escombros de viviendas que están siendo reparadas o demolidas a tres años del considerado el sismo de mayor magnitud del último siglo.
Fuente: